Yo soy… simplemente aquel
Que la gente llama mendigo y poeta
El que vive y muere por ti en cada día
Soñando contigo en cada instante de su vida
Soy simple aquella oscura sombra
Que muere agonizante con la llegada del día
Y renace en cada noche cuando mi corazón te nombra.
Yo soy... Simplemente aquel
Silencio y desvelo
Que en el viento se pierde
Para formarse nube en azul del cielo
Para volverse lluvia y mojar tus cabellos
Soy la sombra de la luz que despiden
Tus otoñales ojos tan bellos.
Yo soy… simplemente aquel
El que llora por ti
Al recordarte y saberte tan lejana
El poeta que nunca sabrás de mí
Que nadie te contará de mi existir
El que pierde cada noche su alma
Y muere pensando en vos sobre su cama
El que sale a pelear vida,
Con su tristezas a cuestas cada mañana.
Yo soy… simplemente aquel
Que vive sin razón
Que no le quedan más sueños ni esperanzas
Soy simplemente un espejismo, una ilusión
Soy simplemente el hombre que no ha vivido
Y su ser no se refleja en un espejo
Soy simplemente una quimera olvidada
Simplemente una tímida visión, un pálido reflejo
Un recuerdo perdido en el tiempo y en la inmensidad
En lo profundo del mar de los olvidos.
Yo soy…. Simplemente aquel
Que no tiene alegría en su risa
Que navega solitario entre la gente
Gastando vida y muriendo sin prisa
Caminando con la vista mirando el piso
Poeta y mendigo porque Dios así lo quiso
Soy simplemente una borrosa caricatura
En blanco y negro de tiempos lejanos
Soy simplemente una sombra oscura
Que se diluye como el agua entre las manos.
Yo soy…. simplemente aquel
El que escribe tus poemas amor
El que firma con un seudónimo
El mendigo, el poeta Mario anónimo
Solo un hombre común no un gran Sr.
Simplemente una efímera figura
Navegante solitario por el mar imaginario
Electrónico de la web sin rumbo ni destino
Simplemente soy una piedra más del camino.
Yo soy…. simplemente aquel
Una historia escrita en el viento sin final
Melodía en las hojas de un tiempo otoñal
Un libro que nadie terminó de leer
Una utopía que murió sin nacer
El final de una historia de amor
Que mató la realidad y se quedó sin florecer.
Yo soy… simplemente aquel
El que te ama en silencio
El que nunca podrá ser tu dueño
Y sueña con tener
Entre mis manos algo de tu ser
Una fantasía imposible de creer
Llora mi corazón desconsolado
Otro sueño que la vida le ha robado.
Yo soy… simplemente aquel
Que sueña con ser parte de tu sombra
Tú serás el éxito, el glamur, las luces
Las pasarelas, las marquesinas
Las que, con doradas letras en oro te nombran
Aparecerá tu nombre Adéle galardonado
Para El Oscar de la academia nominado.
Yo soy… simplemente aquel
Que en vos baja al mirarte diré
Siempre tuve razón de lo que he dicho
Eres la mujer más bella de este MUNDO
No por lo que yo siento, ni por un mero capricho
Corre una lágrima por mis ojos
Me iré sintiéndome más insignificante que un despojo
Para abrazarme con la noche más oscura de vida
Y fundirme en la hoguera de los silencios
No sin antes pronunciar tu nombre Adéle
Quedará grabado en cada trozo de mi piel.
