Si fuera tan sencillo
Se trata de escribir dicen...
que fácil parece,
la gente cree que las palabras
salen así como así,
nunca piensan si duele parir letras
a esta vida;
vomitarlas como constelaciones infinitas
embarradas en el universo terso del papel.
Que saben ellos de las vísceras desparramadas,
prosa inexacta respirando por primera vez
la cruel virtud del ser humano
Poesía engendrada de noche
bajo el coño del universo
en el momento mismo del orgasmo desmedido.
Si tan sólo se tratara de escribir y ya,
poner pluma y papel y dejar que los trazos sucedan
como sucede la primavera y los caprichos del verano.
Ojalá y fuera más sencillo que entender que el amor no basta,
que la palabra es simple caricia
cuando de abrazar tu imagen se trata.
Si escribir fuera más sencillo,
si no tuvieran que injertarse la lejanía,
el dolor,
la luz de tu mirada,
el respiro hondo,
los besos más amargos,
las promesas rotas y remendadas,
el silencio,
la indiferencia,
las más bellas carcajadas,
las disputas,
la ira, los comienzos,
las caricias abyectas a media noche
y a media calle,
los reproches de tu familia,
la ausencia de la mía,
los gemidos,
las uñas enterradas,
la espalda arañada,
el grito ahondado,
la súplica, el consuelo,
y ese afán tuyo de creer
que escribir es lo mío.
No,
si escribo es porque el ruido de la tinta
es más fuerte que mi voz.
Grito sin ruido,
ensordecido a fuerza de poesía.
Pero se trata de escribir...
Bueno, está bien,
si tengo que hacerlo
permíteme escribirte algo:
Las letras no me sirven
para escribir el verso
que tus ojos merecen leer.
Pero mis ojos tienen en su vértigo
la palabra arrancada de los tuyos.
Y así te digo que te amo
Con estas palabras que se llaman silencio...
Si, como aquel silencio nacido entre los labios
cuando de besan,
por primera vez.
Colaboración de Ekthor
México
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