Tu mirada
El instinto animal,
que no sabe fallar,
me invitó a levantar
mi mirada y observar.
que no sabe fallar,
me invitó a levantar
mi mirada y observar.
Tus ojos clavados
directamente en mí,
te vi, me viste y sonreíste,
yo aturdido no sabía qué hacer.
directamente en mí,
te vi, me viste y sonreíste,
yo aturdido no sabía qué hacer.
Por un lado no era indiferente
a tu seductora mirada.
a tu seductora mirada.
Pero tu varón caminaba firmemente a tu lado,
yo apenado me preguntaba,
¿qué hago, la sigo con la mirada
o ignoro tal atracción?
yo apenado me preguntaba,
¿qué hago, la sigo con la mirada
o ignoro tal atracción?
Pero tu mirada poderosa
me guió por el paraíso de tu ser,
invitándome a recorrer
palmo a palmo tu bella figura sedienta de placer.
me guió por el paraíso de tu ser,
invitándome a recorrer
palmo a palmo tu bella figura sedienta de placer.
La emoción se acrecentó
mis sentidos te clamaban,
pero reaccioné a que eras
ajena y por sobre todas
las cosas, valoro mi vida.
mis sentidos te clamaban,
pero reaccioné a que eras
ajena y por sobre todas
las cosas, valoro mi vida.
Sólo conservo tu mirada
como daga en mi cuerpo.
como daga en mi cuerpo.
Miradas que penetran nuestro ser.
Colaboración de Poetayanes
Guatemala
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