A 24 horas de abrazarte
Ya tan solo queda un día para verte, no me lo puedo creer todavía, parece que hace muy poco estaba medio llorando porque no sabía cuando te volvería ha ver y ahora sin más tan solo queda 24 horas.
Claro, pero tú no eres nada consciente de esto, porque no sabes nada, supongo que estarás súper tranquilo, porque no sabes que dentro de nada, cuando menos te lo esperes, estaré allí de nuevo, tocándote, oliéndote, contándonos todas las cosas que hemos sentido o en las que hemos pensado mientras que no estábamos juntos, todo lo que hemos anhelado de la ausencia.
Aunque intento imaginarme ese momento, no puedo, porque tengo tantas sensaciones juntas que no termino de descifrar lo que me gustaría que me recibieras con las mismas ganas que tengo yo de hacerlo. Deseo que me des un abrazo tan grande y tan magnifico que me haga temblar, que me haga hacer realidad todas las sensaciones que tengo aquí olvidándome de que he estado todo este tiempo apartada de ti físicamente, porque sentimentalmente jamás has estado apartado, ¡nunca!...
Siempre te llevo, y cada minuto siempre tengo la excusa de que aparezcas en mi mente por cualquier motivo que a veces desconozco, haciendo así que día a día siempre permanecieras aquí, como algo del que no me puede deshacer fácilmente, como una sombra que no desaparece porque siempre es seguida por el sol, como tu imagen, como tu recuerdo, como tus caricias, que tanto y tanto me gustan.
Pero ya me da igual, porque podré sentirte cerca aunque tan solo sea por pocos días, pero para mi son suficientes, comparados a todos esos que estoy aquí anhelándote, porque ahora las cosas que antes eran insignificantes ya no lo son, y me conformo con poco, porque para mí las sensaciones son diferentes en todos los aspectos, y con eso me vasta para venirme para acá con las fuerzas suficientes para poder volver ha estar un tiempo sin poder disfrutar de ti.
Sé que esto te puede sonar mal, que pienses que como me puede hacer feliz tan poca cosa como un simple abrazo, pero te vuelvo a decir que para mí, ahora mismo todas las sensaciones son diferentes e incluso difíciles de llegar a entender, por eso hay que estar en mi situación para llegar a saber tantas cosas que te he intentando explicarte.
No sé, a veces pienso que aunque estemos a nada de vernos, algo se interponga entre nosotros, haciendo así imposible el poder disfrutar de ti, pero me da igual porque mis ganas son tantas que me da igual lo que suceda, porque mañana te veré me cueste lo que me cueste.
Como deseo verte la cara de asombro al verme, como deseo tener esa sensación de alivio, de que por fin puedo abrazarte y sentirte cerca, como deseo que llegue ese momento que tanto y tanto tiempo llevo esperando y poderlo disfrutar lo máximo posible, para traerme para acá los mejores momentos disfrutados contigo.
Colaboración de María Sambar
España
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