Llegaste tú
Has llegado a mi vida,
como el caudal de un río,
que crece después de una noche
de tempestad.
Llegaste de improviso
arrasando con tu corriente,
moléculas de mí ser
que nunca habían sido movidas.
Y como después de la tempestad
viene la calma, así se encuentra
ahora mi alma...
pero sin dejar de estar apasionada.
Reflorece mi ser, como un campo
que recibe con amor los intensos
rayos solares.
Llenas con la luz de tus ojos y con
el calor de tu cuerpo
hasta el último rincón de mi ser
que no ha sido habitado.
Has venido a mí,
y no sé si es para quedarte,
por el momento sólo me conformo
con disfrutar los momentos mágicos
que los dos conformamos.
Hasta el último rincón inhabitado.
como el caudal de un río,
que crece después de una noche
de tempestad.
Llegaste de improviso
arrasando con tu corriente,
moléculas de mí ser
que nunca habían sido movidas.
Y como después de la tempestad
viene la calma, así se encuentra
ahora mi alma...
pero sin dejar de estar apasionada.
Reflorece mi ser, como un campo
que recibe con amor los intensos
rayos solares.
Llenas con la luz de tus ojos y con
el calor de tu cuerpo
hasta el último rincón de mi ser
que no ha sido habitado.
Has venido a mí,
y no sé si es para quedarte,
por el momento sólo me conformo
con disfrutar los momentos mágicos
que los dos conformamos.
Hasta el último rincón inhabitado.
Colaboración de Rocío
México
México
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